Francisco Pascasio Moreno es nuestro héroe explorador, naturalista y ¡diputado! Un héroe sin uniforme y con ideas, que recorrió la Patagonia desconocida a fines de 1800. Arbitró como perito para definir los límites con Chile, y cuando el gobierno argentino lo recompensó con 25 leguas de tierra por su destacado trabajo, él las donó para que fueran conservadas. Ahí se creó el Parque Nacional Nahuel Huapi, el primero de Argentina.
El reconocimiento y gratitud al gran Perito llevó a usar su nombre desenfrenadamente. Es cierto que suena extraño, utópico, estar orgulloso de un diputado, comprobar que no actuó en beneficio personal sino para el bien común. Pero también es cierto que es turísticamente complicado explicar que en una misma provincia haya un Glaciar Perito Moreno, un Parque Nacional Perito Moreno y una localidad Perito Moreno. Eso sin contar alguna calle, una remisería, la tienda de souvenirs y seguro que me olvido de algo.
El ejemplo que contaré le sucedió a unos extranjeros, pero se podría aplicar a más de un argentino distraído en la clase de geografía. Antes de contarlo, una aclaración sobre los tres lugares. (Harían falta un pizarrón y un mapa):
Glaciar Perito Moreno. Antiguamente conocido como Ventisquero Perito Moreno, es uno -el más cercano- de varios glaciares (Spegazzini, Upsala, Onelli, entre otros) que integran el Parque Nacional Los Glaciares, a 80 kilómetros de El Calafate. La mayoría de las veces, cuando alguien vuelve de viaje dirá: «¡Estuve en el Perito Moreno!» y no «¡Estuve en Los Glaciares!» De alguna forma, el uso revela la admiración colectiva por este señor comprometido.
Parque Nacional Perito Moreno. Queda a 464 kilómetros de El Calafate, hacia el Norte, por la RN 40 y después por la RP 37. Es uno de los parques menos visitados de Argentina.
El famoso secreto bien guardado que, según cuentan, ni siquiera los guardaparques quieren promover. Dicen que por eso el cartel de entrada no está sobre la RN 40. Pocos saben que adentro están el Lago Belgrano y el cerro León (1470 m); que hay guanacos, cóndores y pumas. Casi nadie sabe, además, que la entrada es gratis, igual que los dos campings, el del lago Burmeister y el del Rincón.
Este parque del oeste de la provincia, muy cerca del límite con Chile, no tiene nada que ver con los glaciares. Sin embargo, hay sitios Web que confunden a sus lectores ilustrando una nota informativa sobre el parque con ¡una foto de los glaciares!
Perito Moreno. Es una localidad de unos cuatro mil habitantes, a 632 kilómetros de El Calafate.
Este año se llevará su tajada de fama porque las obras de asfalto de la Ruta 40 que la conectan con Bajo Caracoles están casi terminadas. Muchos la usan como base para visitar la Cueva de las Manos (a unos 200 km), que gracias al Cielo, no se llama Perito Moreno.
Ahora sí, la pequeña anécdota que me contó Edit, la cocinera de Sierra Andía un parador nuevo sobre la ruta 37,camino al Parque Nacional Perito Moreno, que a propósito tiene vistas espectaculares sobre el valle del Río Belgrano y vende combustible las 24 horas.
Resulta que una madrugada la despertaron unos extranjeros con golpes fuertes en la ventana. Estaban nerviosos y desorientados buscando… ¡los glaciares! Ella tuvo que explicarles lo del nombre repetido y contarles que el glaciar Perito Moreno estaba lejos, en otra dirección.
(La remisería está en El Calafate y ¿adivinen cuál es el recorrido más vendido? Sí, el viaje al Perito Moreno, el glaciar).

Atrás del Chinatown, el Lower East Side es un barrio con onda. Vamos a definir “con onda”, pero antes un toque de historia. Es uno de los distritos más antiguos de la ciudad, donde la mayoría de los edificios son esos inconfundibles de Nueva York con ladrillo a la vista y escaleras de incendio en el frente.
Para los que buscan una inmersión de compras en Nueva York, el 





1.Brunnenmarkt. Un pedazo de Turquía. Los vendedores anuncian sus mercancías a voz en grito e interpelan al viandante en turco. El alemán se habla con acento y regatear es obligatorio. A lo largo de la Brunnengasse, déjese guiar por el olfato: el olor de las naranjas y del pan recién horneado se mezcla con el del pescado fresco y los kebabs. Si le da hambre, deténgase en Kent y saboree los kofte y las berenjenas rellenas o descanse en alguno de los cafés de Yppenplatz. Brunnengasse Lu-Vi 6- 19.30
5. Cuarteto de cuerda en
ue Nacional de Donau-Auen. Popularmente conocido como Lobau y situado a las afueras de Viena, el Parque Nacional de Donau-Auen es uno de los últimos humedales de Centro Europa. Un largo paseo a pie o en bicicleta para oxigenar los pulmones, un baño en alguno de los lagos (incluida una zona nudista), un paseo en balsa, seguir los pasos de Napoleón en la batalla de Aspern, o tomar parte en un aula de la naturaleza para descubrir los secretos del parque son algunas ideas para disfrutar de un día al aire libre.
las nueve de la noche cuando el avión aterrizó en Aeroparque. Salí rápido, ni siquiera fue necesario mostrar el ticket del equipaje.