Médium de las Vacacionum

Por hache o por be, me tocó llevarle una revista Lugares al sobrino de uno de mis entrevistados de la nota de Montevideo. Él se la haría llegar a su tío, que tiene más de 80 años y vive en Carrasco. Por hache o por be no pude ver al sobrino, que trabaja en una financiera.

Lo imagino ocupado, rodeado de números, papeles de bancos, sonido de la Bolsa y llamados, algo estresado quizás. Imagino el momento en que la revista aterrizó en ese contexto de oficina del microcentro, como si le pusieran una maceta con una plantita en el medio del escritorio. Le llamó la atención, la abrió y de repente se puso a viajar. Sin reservar, sin sacar pasaje, sin ajustarse el cinturón, incluso sin pagar. Sólo con pasar algunas páginas.

Por hache por be, después de un rato el sobrino me llamó para agradecerme el gesto de llevarle la revista. Eso dijo, pero en realidad creo que su llamado fue porque quería hablar de viajes. Así cómo viajó a través de las páginas de la revista, salir de la oficina a través mío. Contarme que le encanta viajar, que le gustaría ir a Etiopía y que tiene un lugar preferido en Corrientes, unas barrancas al Paraná sobre las que prometió escribir. No es la primera vez que me pasa. A veces creo que tengo algo de médium. Médium de las Vacacionum.

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Una respuesta en “Médium de las Vacacionum

  1. Raquel dijo:

    Definitavemente la revista llego en el momento preciso y a la persona precisa. Muy buena anécdota!!

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